SER VEGANA NO ES CARO

Cuando digo que soy vegana, después de la pregunta estrella ("¿de dónde sacas las proteínas?"), viene la frase afirmativa que sirve de excusa a los no veganos: es que ser vegano es muy caro. 

No es que los productos veganos y ecológicos sean caros, es que el resto de productos son muy baratos!! Si un supermercado te cobra 0,40€ por una barra de pan, pregúntate que lleva realmente esa barra y de qué forma ha sido hecha... Si un restaurante de comida rápida te sirve un menú de hamburguesa, patatas y refresco por 3€, pregúntate qué tipo de ingredientes se ha utilizado, qué "carne" te estás comiendo... 

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Si seguís pensando que los productos veganos y ecológicos son caros, pensad en lo importante que es la alimentación: es nuestra medicina; es el combustible que le damos al cuerpo para que funcione bien. Si es un combustible de mala calidad, a la larga el cuerpo se resentirá y empezarán a aparecer "defectos" por aquí y por allí. Yo veo mi alimentación como mi medicina, y todo el dinero que me gasto ahora en comida de calidad es una inversión de futuro, ya que lo que me gasto ahora en productos de pequeños comercios locales, de agricultores, de artesanos... no tendré que gastarlo mañana en médicos, farmacias, hospitales... 

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A pesar de todo esto, es cierto que con los sueldos mileuristas de España cuesta llegar a fin de mes, a veganos y a no veganos; por esto, hay que priorizar, gastar en lo realmente importante y necesario. Yo no veo nada más importante que la comida, por eso mi prioridad son los productos de calidad. Eso supone reducir el presupuesto en otras cosas menos necesarias: 

* Móvil: tengo una línea de prepago. Cargo 10 euros una vez al mes, más o menos, y sólo utilizo el saldo para llamar. Normalmente me conecto a través de Wifi (siempre se encuentra algún rincón con internet), y evito conectarme cuando voy por la calle, para no ser uno de esos zombies que no saben ni por donde van. 

* Ropa y complementos: sólo compro de segunda mano. Para llevar una vida más sostenible, no generar residuos y ahorrar. No veo porqué gastarse 50€ en una prenda que te puede costar 5€. Para mi la ropa no es algo de primer necesidad, y además se encuentran cosas realmente bonitas en las tiendas de segunda mano, como estas: 

* Coche: no tengo. Por suerte vivo en una zona donde hay de todo, estoy a 15 minutos del centro caminando y tengo el trabajo a 10 minutos en autobús. Entiendo que a veces es indispensable, pero yo pienso estar sin coche todo el tiempo que pueda. Comparando lo que gasto en autobús y lo que gastaría en gasolina en un mes, no hay duda, el transporte público es mucho más económico, a parte de que no tienes gastos de reparación, mantenimiento... y no tienes el problema de buscar aparcamiento.  

* Cosmética: intento que sea casera siempre que puedo. Dicen que no deberías ponerte en el cuerpo nada que no puedas comerte... Mi baño a veces parece una cocina: aceite de coco, aceite de sésamo, exfoliante de sal y aceite, bicarbonato sódico... Hace ya tiempo que no utilizo gel para el cuerpo, lo sustituí por una pastilla de jabón natural (suelo comprarlas en mercados y ferias), que dura mucho más, no daña la piel y nos evita generar residuos porque no viene en envase. 

* Comida: compro alimentos de primera necesidad (fruta, verdura, legumbres, cereales, semillas, frutos secos), y el resto intento hacerlo en casa. Por ejemplo, las hamburguesas vegetales suelen ser un poco caras, pero hacerlas en casa es super económico y podemos hacer mucha cantidad para congelarlas. Y muchas otras cosas se pueden hacer caseras: leche vegetal, barritas energéticas, tofu, seitán, patés... Nos sale más barato y además comemos con la felicidad de haberlo hecho en casa con cariño. 
Sobre la proteína vegetal, no es necesario comer siempre tofu, tempeh, seitán... podemos recurrir a las legumbres "de toda la vida", que son super económicas y nos aportan un montón de propiedades. 
Tener un huerto en casa es otra opción para ahorrar en verdura, y además tenemos la satisfacción de haberlo cultivado y visto crecer. 

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Ya veis que ser vegana no es caro, sólo hay que elegir en qué queremos gastar nuestro dinero, y reducir otros gastos (innecesarios). Una de las (mil) cosas buenas que tiene ser vegana es que te conviertes en una persona muy "verde", empiezas a pensar en el impacto que tienen tus acciones, en lo que hay detrás de cada productos, y buscas la forma de vivir más sostenible y respetuosa con el Planeta. El hecho de llevar una vida más ecológica supone ahorrar en muchas cosas, y aprender a gastar el dinero inteligentemente.    

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Espero que mis argumentos os hayan convencido :) Os aseguro que cuando te acostumbras a vivir así, sencillamente, de forma sostenible y sin grandes "necesidades" materiales, ya no quieres volver atrás! 

Feliz día :-)